martes, 26 de abril de 2011

Un viaje a pie

Si antes del almuerzo uno ha podido decir una palabra amable a un ser humano desconocido, el almuerzo está ganado con creces.

...

A esos muchachos tan simpáticos que encontrándose en el umbral de la puerta de la vida se sienten poseídos del noble impulso de la ambición personal y -yo supongo- del archinoble impulo de la ambición de servir, y preguntan: "¿Qué hemos de hacer? ¿Podría usted tener la amabilidad de darnos una orientación y decirnos lo que podríamos hacer?", yo les aconsejaría un viaje a pie.

(Josep Pla en Un viaje a pie).





No hay comentarios: