jueves, 29 de noviembre de 2012

El mejor de los comienzos

No recuerdo bien la primera vez que oí el Nocturno No.20 Op. Póstumo en Do menor de Chopin, pero lo cierto es que, desde entonces, cada vez que lo escucho me pregunto qué es lo que sentía, qué quería transmitir el maestro cuando se interpretara su Nocturno. A mí el vello se me sigue poniendo de punta, cierro los ojos y me dejo llevar. El viaje es siempre diferente.

El miércoles comenzó en Albacete el “XXXII Concurso Nacional de Jóvenes Pianistas” gracias al empeño, esfuerzo y dedicación de las Juventudes Musicales de Albacete, a cuyo frente se encuentra don Agustín Peiró. El concierto inaugural corrió a cargo, a petición propia, de don Ramón Coll, que a su vez forma parte del jurado. Fue el último concierto del gran músico e intérprete  nacido en Menorca y lo quiso dar en Albacete, un hecho que debe honrarnos. Una enfermedad ocular le ha dejado con tan solo un 25% de vista en uno de los ojos y por el otro nunca ha visto, he ahí el motivo de su retirada. En la II parte del concierto el maestro Coll interpretó la obra antes citada, “¡vaya regalo que me ofrece el día!”, pensé. Aparecieron sus manos sobre el teclado y comenzó a bailar con sus teclas, primero lentamente, con disimulo, poco después, ya en medio de la pista, el público contemplaba el arte y la complicidad entre quién compuso y quién interpreta siglos después, algo difícil de describir con palabras, misterioso, mágico, angelical me atrevería a decir.

El resto del concierto también sensacional, con las Cuatro Baladas de Brahms, y de nuevo Chopin con otros dos nocturnos y la Sonata op. 35 nº 2. El sonar de la Marcha fúnebre fue otro de los momentos estelares de la noche, el Auditorio Municipal quedó cubierto por un silencio sepulcral que hacía difícil no emocionarse. Tanto magisterio le costó a don Ramón tener que salir en varias ocasiones a recibir los aplausos del público, a los que respondió con sucesivas propinas. No sabemos aún quien será el ganador del concurso en la presente edición, pero lo que no podemos negar es que ha tenido el mejor de los comienzos. Y nosotros, el público, tan agradecidos.

Ramón Coll interpreta a Chopin 

lunes, 19 de noviembre de 2012

Pedro Iturralde

El pasado jueves tuve la gran fortuna de ver en directo a don Pedro Iturralde. Con él y su cuarteto daba comienzo el Festival de Jazz de Albacete. A sus 83 años hizo que los ángeles se acercaran al saxofón y a su clarinete para deleitar al público con música celestial. Un contrabajo, el piano y la batería hicieron el resto. Pedagogo él, fue “desnudando” cada uno de los temas que tocó, dónde y cuando los compuso, qué o quién los inspiró, las partes y estructura del todo, las melodías, influencias, etc. Todo un concierto y toda una clase del primer Catedrático de conservatorio de Saxofón que ha dado este país. Fue Pedro Iturralde el que introdujo el Jazz en nuestra querida España y al que, los aficionados, le debemos tanto. ¡Bravísimo!


"Suite Hellenique"

miércoles, 14 de noviembre de 2012

Así en la huelga como en la guerra, la ceja


El clan de la ceja salta a la palestra, de nuevo. ¿Han visto el vídeo? No tiene desperdicio, se lo recomiendo. Para dar el pego de working class, se han vestido de “gala”, pero ahora con los harapos del viejo desván, y así ellas se han dejado su caro y lujoso maquillaje en el cajón del tocador, y ellos, con barba de tres o cuatro días, cumplen mejor con la “misión”: ¡Nos roban el futuro!
Pilar Bardem, pobre, es la veterana del clan, la yaya, y a su vera los polluelos, pobres mileuristas asalariados y explotados por el oprobioso capital, ellos, a quienes los “fachas” les van a quitar todo, todo, todo. Ninguno, tampoco Toxo y Méndez –trabajadores natos-, aparece con sus lujosos relojes, pobres, ni en sus modestas moradas de varios cientos de metros cuadrados, pobres, ni dicen el nombre del colegio “pijopúblicoprogre”, y de pago, donde llevan a sus hijos, pobres, incluso la yaya Bardem, pobre, ha tenido que sufrir el lamentable espectáculo de ver nacer a su nieto en el pesebre más caro y lujoso de EE UU, el odioso país imperialista y yanqui que tanto detesta y donde viven, pobres, su hijo y su nuera, muy progres ellos. Y Almodóvar, pobre, para rodar el spot ha tenido que dejar a un lado las limusinas y el glamour del Hollywood que tanto hastío le produce, el pobre. Por todo esto y por más nos piden que acudamos a la huelga, porque ahora nos van a robar todo, dicen que incluso el futuro, pobres míos.
Con Zapatero ni se les escuchó, porque tenían de todo, sobre todo brotes verdes, también subvenciones, muchas. Y mientras, miles de personas perdían sus trabajos cada día, miles de desahucios se ejecutaban y, ¿dónde estaba el clan de la ceja? Cejeando, hasta la victoria final. Pero quién la obtuvo fue Rajoy, el “facha”, y se acabaron los brotes verdes, y algunas subvenciones, y pensaron, claro, “ahora se van a enterar”.

Y es que con la huelga pasa como con la guerra. Contra la de Irak nos manifestamos todos, y eso que allí España iba en misión humanitaria, no a pegar tiros. ¿Se acuerdan del espectáculo de los Goya? Gobernaban los “fachas”. Contra la guerra en Libia, a donde España sí que acudió a pegar tiros, y los pegó, el clan de la ceja hizo mutis por el foro, desaparecidos en combate, nunca mejor dicho. En Moncloa dormitaba Zapatero, claro, el progre. Pues eso, que en la huelga como en la guerra el clan de la ceja actúa, pero según quién gobierna.


*** Publicado en La Tribuna de Albacete el 14.11.12 (día de autos).
       Publicado en ABC el 14.11.12
       Publicado en El Día el 16.11.12

martes, 16 de octubre de 2012

"Parada por vacaciones"


Me comentaba el otro día un familiar que para que le salieran las vacaciones del pasado verano más baratas se había tenido que apuntar al paro. A saber. Resulta que esta persona ejerce muy orgullosa como madre de sus tres hijos y ha decidido por unos años dedicarse al cuidado de los mismos y a trabajar en su casa, lo que comúnmente se conoce como “ama de casa”.
Resulta que al elegir el hotel se encuentra con el siguiente eslogan: “10 % de descuento en caso de estar desempleado”. Lógicamente, en estos tiempos que corren de sujetarse el cinturón lo máximo posible, lo que hizo esta persona fue ir rápidamente a inscribirse en la oficina de empleo como demandante del mismo.
Hay que decir que, hasta el momento de hechos, esta mujer no figuraba como “parada” porque no estaba buscando trabajo remunerado fuera de su casa, tampoco lo busca ahora pero ya sí que figura oficialmente como demandante de empleo.

Contándome todo esto yo me preguntaba por el porcentaje de parados que figuran oficialmente como tales y que realmente están buscando empleo… Ello sin entrar en las prejubilaciones fraudulentas a los 63 años con las que, cobrando dos de paro, se alcanza la jubilación oficial y se pasa a mejor vida (ya lo han hecho dos años antes), o la ingente cantidad de personas que perciben la prestación por desempleo y, a su vez, realizan una actividad remunerada percibiendo su salario “en negro”. ¡Y venga a subir el IRPF! Está claro, ¿no?

Publicado en Estrella Digital el 16.10.2012
Publicado en El Día de Albacete el 17.10.2012

jueves, 23 de agosto de 2012

Balzac. La novela de una vida, de Stefan Zweig


Hace un tiempo Fernando R. Genovés me advirtió de la maestría de Stefan Zweig en su condición de biógrafo. Antes de ponerme a leer a Honoré de Balzac, Las ilusiones perdidas, tuve a bien conocer más a fondo su vida y obra. En Balzac. La novela de una vida, de Stefan Zweig, he visto satisfecha mi curiosidad.

Finalicé su lectura el pasado 15 de agosto y aún hoy, cuando cierro los ojos, veo a Balzac levantándose de su lecho al filo de la media noche y, vestido con su túnica blanca al modo de los frailes dominicos, ponerse a escribir de una tacada durante 15 o 17 horas seguidas, parando únicamente para tomar un almuerzo ligero o darse un baño en el que poder relajar la mente durante unos pocos minutos. Bebedor empedernido de café fueron cientos de miles de horas las que Balzac dedicó a escribir infinidad de cuartillas, dejando para la posteridad una de las obras más extensas de la literatura de todos los tiempos.

Escribió absolutamente de todo, novelas, relatos, teatro, artículos, cartas, fundó periódicos y revistas que prácticamente escribía en solitario, y mucho de lo que hizo tuvo su origen en una característica que le acompañó durante toda su vida: vivió endeudado y murió arruinado. Por eso se dice que de su ingente obra literaria tan solo una parte merece la pena, seguramente aquella que escribió sin la presión de sus acreedores o del fisco de la época. Y es que su ambición le llevó a emprender mil y una empresas fracasando en todas y cada una de ellas con una excepción, su empresa literaria.

Balzac se propuso fotografiar “literariamente” al conjunto de la sociedad de su tiempo, para ello se valdría de un conjunto de novelas en las que aparecerían unos 4000 personajes. Es lo que Balzac denominó como La Comedia Humana, el retrato social más fidedigno de su época. Una muerte temprana le impidió culminar un proyecto que había preparado minuciosamente. No obstante, dejó para la posteridad la vida de Francia vertida a lo largo de 2000 personajes.

Stefan Zweig admiró profundamente la vida y obra de Balzac, al que consideró el más grande de los escritores. Prueba de ello es esta obra póstuma en la que se adentra en lo más profundo de sus pensamientos, interrogantes, contradicciones, pasiones y modus vivendi.

Ha sido todo un acierto seguir la sugerencia de Fernando R. Genovés, al que desde aquí agradezco su consejo; es momento ahora de sumergirnos en la Francia de Las ilusiones perdidas.


miércoles, 8 de agosto de 2012

Sendino se muere

Siempre que salgo de viaje echo varios libros en la maleta de la moto. “Sendino se muere” cayó en mis manos justo en esos momentos de preparativos previos y lo eché. Disfruto de unos días de descanso en un la costa mediterránea y  varios son los frentes que tengo abiertos en lo que a lecturas se refiere,  el de Pablo D´ors lo terminé ayer.

Pablo D´ors, en su condición de capellán de un hospital, nos cuenta la historia de la doctora África Sendino. Más bien una parte de la misma. Un buen día Sendino advierte la presencia de un bulto  en su pecho y ella, que es médico, no duda un instante en acudir a sus colegas del hospital para que la sometan a las pruebas pertinentes.  “A las nueve y cuarto salgo de su laboratorio con un nuevo panorama vital: tengo cáncer”, escribe Sendino en su diario.

D´ors destaca en ella, nada más conocerla, tres cualidades: su compostura, su manera de hablar y su altísimo nivel espiritual. “Si Dios me brindase rebobinar la moviola de la vida y me ofreciera elegir entre las dos opciones posibles (salud sin quiebra o lo que realmente me ha sucedido), no podría decir que no a lo que sucedió en realidad. Porque Dios no nos ofrece la enfermedad como castigo, sino como camino. Y porque en ese camino yo estoy aprendiendo intensísimas lecciones de lo que supone que Dios componga el argumento de mí biografía. Comprendo por fin que la Providencia divina no es un simple planteamiento, sino una realidad cotidiana que me aguarda en el rostro de mis amigos. Y presencio, como un espectáculo grandioso, hasta dónde puede llegar la bondad de quienes me rodean”, señala en su diario.

Pablo D ´ors asiste a la doctora África Sendino en su condición de ministro de la Iglesia Católica. Probablemente, conocedora de su faceta como escritor, Sendino pide a su capellán que la ayude a dejar por escrito el testimonio de la experiencia vital que ahora enfrenta en su camino, la enfermedad.

“Sendino se muere” es ese testimonio. Una narración sobrecogedora en la que Pablo D´ors vierte con sencillez descriptiva y profundidad humana y espiritual la vivencia de una mujer de fe ante la noticia de un cáncer que finalmente termina con su vida. Pero hay más, como médico la doctora África Sendino se adentra en el mundo de la medicina y en como pudiendo hacerse mucho más, sobre todo a nivel humano, se hace tan poco.  “Porque, durante mi enfermedad (o quizá siempre, pero solo ahora lo he percibido), he sido receptora de continuas y conmovedoras muestras de afecto. Gracias a que yo era médico, por ejemplo, todo se me hizo de forma inmediata, con un compás de espera mínimo. ¿Qué deben ser –me pregunto- las esperas, llenas de incertidumbre, de las gentes ajenas al hospital? Trata a cualquier enfermo como quisieras que te tratasen a ti mismo, esa es la ley”, lo que no es sino un órdago a la profesión médica, que con tanta frecuencia incumple “la ley”.

Humanidad, espiritualidad, fortaleza, sinceridad, humildad y aceptación se dan cita en “Sendino se muere”, un testimonio excepcional de una mujer que ve en su enfermedad un regalo de Dios, la oportunidad de poner en práctica la “teoría” aprendida durante su vida. Y creo que es eso precisamente, aceptar la enfermedad como un regalo divino, lo que nos admira y conmueve de África Sendino.

Estamos ante una hermosa historia vital cuya lectura es, sin duda, más que recomendable.

SENDINO SE MUERE, PABLO D´ORS, (Editorial Fragmenta, 2012)

jueves, 2 de agosto de 2012

Una exposición de e-books


El amante del libro tiene una oportunidad de oro para acercarse a Madrid y disfrutar con la exposición Grandes encuadernaciones en las Bibliotecas Reales (S.XV - S.XXI), en el Palacio Real. Un recorrido por las obras más selectas que forman parte de las bibliotecas de las distintas casas reales a lo largo de más de cinco siglos. Y de colecciones privadas como la de Diego Hurtado de Mendoza o Diego Sarmiento de Acuña, Conde de Gondomar. Auténticos tesoros con cuerpo y alma, un canto al libro y, nunca mejor dicho, a las joyas de la corona. Ejemplares en soportes con las texturas más diversas, los colores más sabiamente combinados, las formas más sugerentes en todo tipo de tamaños, grande, mediano o pequeño, y caligrafías 
de todo tipo en distintas lenguas, están a nuestra disposición para ser contemplados. Y valorados.

Porque qué duda cabe que los libros tienen su valor. No solo hay detrás un trabajo intelectual merecedor del mayor de los respetos, por mucho que pueda no gustarnos o agradarnos su contenido, sino que hay una labor de diseño, edición e imprenta que lo dota de un cuerpo capaz de conservar el alma de la obra. Por eso uno no puede entender cómo hay personas que llaman “libro” al contenido informático de determinados soportes tecnológicos modernos, véase los famosos e-books. Eso que vemos en la pantalla, otra pantalla más, no seré yo quien niegue que se trata de un texto reproducido en el soporte x, pero: ¿de veras que hablamos de “libros”? Me gustaría saber lo que pensaría Johannes Gutemberg al respecto.

Hay un momento en la película Tierras de penumbra en que un alumno contesta al profesor (C. S. Lewis) que “leemos para saber que no estamos solos”. Es cierto. Levanto la vista de la pantalla del ordenador y dirijo la atención a mi biblioteca. Ahí están Góngora, Quevedo, Cervantes, Galdós, Baroja, Unamuno, Maeztu, D´ors, Ortega y Gasset, Benavente, Marías,…, y tantos otros. Cada uno de ellos me acompaña en el camino, rodeado estoy de sus obras, de sus libros. Los observo, leo y releo, imaginando que los autores están sentados en frente, en plena tertulia de sobremesa, compartiendo en voz alta lo que dejaron escrito. Y siento que no estoy solo.

¿Ustedes se imaginan una exposición de e-books? Yo tampoco.


Publicado en el suplemento cultural de El día el 05.08.2012

viernes, 27 de julio de 2012

Un hombre para la eternidad


Dicen que una imagen vale más que mil palabras. Y hay películas –secuencia de imágenes- de cuya “lectura” se pueden sacar infinitas conclusiones y motivos para la reflexión. Una de ellas es Un hombre para la eternidad (A man for All Seasons, 1966), dirigida por Fred Zinnemann y ganadora de 6 Oscars con Robert Shaw en el papel de Enrique VIII y Paul Scofield en el de Tomás Moro. Se trata de una película para la eternidad.

Tomás Moro es decapitado por ser leal a su conciencia, a la Iglesia Católica y por su fidelidad y amor a Dios. Por ser coherente consigo mismo y sus convicciones, frente al poder. Hombre público, en su condición de jurista fue miembro del Consejo de Estado y ocupó distintos puestos de relevancia, tanto en los más altos tribunales como en su condición de canciller de Inglaterra; puesto este último para el que fue nombrado por el mismo rey Enrique VIII. Cuando nace el problema sucesorio en el seno del matrimonio entre el citado monarca y Catalina de Aragón –no pueden tener descendencia-, Enrique VIII ve en el divorcio la solución, un camino que implicaba la ruptura con la Iglesia de Roma, de la que era miembro. Tomás Moro es presionado por el cardenal Thomas Wolsey (Orson Welles) para que apoye a Enrique VIII. La respuesta de Moro ante la coacción del poder es de lo más sugerente: “Creo que cuando los hombres de Estado se olvidan de su propia conciencia y la anteponen a sus deberes públicos, conducen a su patria por el camino más corto hacia el caos. Entonces únicamente confío en la oración”. Acusado de alta traición, es decapitado el 28 de enero de 1547 por negarse a jurar y reconocer a Enrique VIII como jefe supremo de la Iglesia de Inglaterra. Llevó sus convicciones hasta la muerte.

Después de ver Un hombre para la eternidad, y analizando la trayectoria seguida por nuestro actual régimen – ¿democrático?-, uno se pregunta por la conciencia de muchos de los hombres que nos gobiernan o que tienen algún tipo de responsabilidad pública, porque mira que el caos es morrocotudo. Claro, que aquí nadie será “decapitado”, y a buen entendedor,…, ya saben.


miércoles, 25 de julio de 2012

Festividad de Santiago el Mayor


Santiago el Mayor fue uno de los Apóstoles de Jesús y hermano de Juan. Su biografía cristiana empieza cuando, pescando junto a su hermano en el lago de Genesaret, ante la llamada de Jesús lo deja todo y Le sigue.

Uno de los discípulos más apreciados por Jesús, estuvo presente -junto a Simón Pedro y su hermano Juan-  en dos de los momentos más importantes de la vida del Maestro: la transfiguración en el monte Tabor y la oración en el Huerto de los Olivos. Así mismo, las Sagradas Escrituras dan cuenta –en los Hechos de los Apóstoles- de la presencia de Santiago el Mayor en el Cenáculo en espera orante de la venida del Espíritu Santo:

"Los Apóstoles regresaron entonces del monte de los Olivos a Jerusalén: la distancia entre ambos sitios es la que está permitida recorrer en día sábado. Cuando llegaron a la ciudad, subieron a la sala donde solían reunirse. Eran Pedro, Juan, Santiago, Andrés, Felipe y Tomás, Bartolomé, Mateo, Santiago, hijo de Alfeo, Simón el Zelote y Judas, hijo de Santiago. Todos ellos, íntimamente unidos, se dedicaban a la oración, en compañía de algunas mujeres, de María, la madre de Jesús, y de sus hermanos.” Hechos 1, 12-14.

Decidió libremente seguir la llamada de Jesús y lo dio todo, incluso la vida:

“Por aquel entonces, el rey Herodes hizo arrestar a algunos miembros de la Iglesia para maltratarlos. Mandó ejecutar a Santiago, hermano de Juan, y al ver que esto agradaba a los judíos, también hizo arrestar a Pedro. Eran los días de «los panes Acimos». Hechos 12, 1-3.

Morir por Jesús no es un hecho aislado del pasado, hoy ocurre a lo largo y ancho del mundo, probablemente mientras escribo estas líneas algún cristiano esté pagando las “consecuencias” de seguir a Jesús, Crucificado por nosotros. En el día de su festividad conviene resaltarlo, y más cuando hablamos del Patrón de España.

Santiago el Mayor, por Rembrandt, 1661.

lunes, 16 de julio de 2012

Buenas tardes

Con razón los arrullos del jueves tarde en el parque de Abelardo Sánchez tenían un tono diferente. La Banda Sinfónica tomaba de nuevo el templete del retiro albaceteño con la presencia de un público fiel y la expectación y el acompañamiento del arrullar de las palomas.

Pero de lo que intentan hablar estas líneas es de otra cosa. Resulta que encontrábase servidor en pleno concierto, sentado en un banco frente al templete, inmerso en la lectura de El Hereje, de don Miguel Delibes, y escuchando la magnífica interpretación de El barbero de Sevilla, de G. Rossini, cuando la señora de pelo gris se acercó. Tendría alrededor de unos 60 años, ni muy alta ni muy baja, con la esbeltez por silueta y una revista en las manos. Yo, a vueltas con los dimes y diretes de Lutero, su reforma y –como siempre pasa- contrarreforma, a penas me había percatado, en un principio, de su presencia. En esto que escucho, en un tono sigiloso, como sin querer molestar, un tradicional “buenas tardes”. Buenas tardes.

Hemos llegado a unos niveles de progreso y avance científico y tecnológico que nunca jamás hubieran imaginado nuestros antepasados y, sin embargo, un cortés “buenas tardes” dicho por un “extraño” llama nuestra atención. O al menos la de servidor. Las buenas maneras, los nobles modales, la cortesía –que no quita lo valiente-, deberían volver a ser protagonistas del día a día y de nuestra relación con los demás. Tampoco nuestros antepasados hubieran imaginado que un gesto de educación como el citado merecería unas pocas líneas a modo de comentario, carta o artículo, pero aquí está. Buenas tardes.



*** Publicado en La Tribuna de Albacete el 14.07.2012
*** Publicado en Hispanidad el 13.07.2012


jueves, 12 de julio de 2012

martes, 10 de julio de 2012

El manuscrito


Los tonos oscuros del entorno ayudan a resaltar todavía más la serenidad de la composición.

La expresión de la mano que escribe nos indica un alto en el camino. De lo contrario los dedos y la posición de la muñeca serían distintos, como en tensión. La mano pausada sujeta entre sus dedos índice y pulgar la pluma. Pero no se trata de una pluma como las de ahora, sino que pertenece al pasado, a un pasado, eso sí, incierto. Podría tratarse perfectamente de la mano de Cervantes, de su pluma y del puño abierto de su camisa. Perdió el brazo izquierdo, no el derecho. Quizás si nos detenemos en el tintero se nos venga abajo lo dicho: ¿demasiado moderno para el siglo XVI, principios del XVII? Puede ser.

Bajo la mano, la pluma y el tintero, lo importante: el manuscrito. Y aquí ahora la imaginación es libre…



Una mano que escribe



En las nubes

Internet forma parte de nuestras vidas, qué duda cabe. Es un mundo en sí mismo, por algunos calificado como “red de redes”. Hoy día, tener acceso a Internet es poder bucear, si no en todo, en buena parte de los temas relacionados con el universo, si se me permite la expresión. Cervantes, para quien “la libertad es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos” -¿o lo es para nuestro hidalgo más famoso?, ¿o lo es para los dos?-, posiblemente se hubiera quedado maravillado ante la posibilidad de acceder al resto del mundo desde la celda donde comenzó a escribir la obra de la literatura española más universal. 

Dicen que para aprender a escribir una biografía hay que leer antes a Stefan Zweig, para muchos el mejor biógrafo de la literatura europea del s. XX. En Internet consulté las obras disponibles en la biblioteca del barrio y allí que me dirigí. Volví a casa con María Antonieta, Balzac: la novela de una vida, Montaigne y con Fouché, el genio tenebroso. Antes, en la zona de los ordenadores, me encontré con la señora Paca, la vecina del tercero derecha. Doña Paca tiene ya ochenta y cuatro años, pero se conserva muy bien, ¡menuda cabeza! Me extrañó verla sentada delante de un ordenador y es que, entablada conversación, resulta que había hecho un curso de Internet para mayores y estaba practicando: “llega una edad en la que hay que adaptarse a los nuevos tiempos”, me dijo. Estaba consultando una página Web dedicada a la cocina tradicional; al tiempo que tomaba notas de las recetas que desconocía, hacía sus aportaciones en el foro habilitado al efecto. “Luego mis hijos y nietos se chupan los dedos”, señaló arrancándome una sonrisa. 

En una entrevista publicada en el XL SEMANAL de 1 de julio de 2012, preguntado a cerca del fenómeno de Internet y su uso, Umberto Eco contestó: "usted y yo, que gozamos de cierta riqueza de conocimientos, podemos aprovechar mejor Internet que aquel pobre señor que está comprando salami en la charcutería de ahí enfrente”. “Internet es un peligro para el ignorante porque no filtra nada. Solo es buena para quien ya conoce y sabe dónde está el conocimiento”, ésta es otra de sus lindezas. Me acordé entonces de doña Paca, antes de su contacto con Internet tuvo dos ocupaciones principalmente: ayudar a su marido en la charcutería y atender al resto de la familia. ¿Qué pensaría la señora Paca si, navegando en Internet, se topa con las declaraciones del famoso escritor y filósofo italiano? ¿Estará muy en las nubes el ático de Milán en el que vive el señor Eco? 


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(Escrito para el taller de articulismo del curso de verano la UNED «Grandes nombres del periodismo literario»)

viernes, 29 de junio de 2012

Semana cultural, del 30 de junio al 8 de julio

El sábado, Dios mediante, aterrizo en Oña (Burgos) para contemplar, por fín, la XVII edición de la exposición "Las edades del hombre"; en esta ocasión toma el nombre de "Monacatus". 


El lunes tendré la gran fortuna de poder asistir, en Gijón, al curso "Grandes nombres del periodismo literario", donde un nutrido grupo de expertos abordarán a lo largo de tres días la faceta periodística de primeros espadas como fueron, y son, Larra, Azorín, Altamira, Clarín, Pardo Bazán o Marías. Sin duda promete.


Altamira-Azorín

Finalmente, el jueves día cinco de julio, acudo a Pedraza para, junto con unos amigos de Tarazona de la Mancha, disfrutar de un pueblo a la sombra de las velas, amenizando la velada la Orquesta Joven de la Sinfónica de Galicia.



A la vuelta de esta cargada y apretada semana mi moto y yo descansaremos de viajes durante algún tiempo y aprovecharemos para dar cuenta al lector de las impresiones vividas. Procede a continuación sumergirnos en lecturas pendientes y continuar peleando con el arte de la escritura, que cada día me merece un mayor respeto.

Hasta entonces, feliz inicio de verano...

jueves, 21 de junio de 2012

Sangre en la arena




Quedaban pocos minutos para que venciera el plazo del ultimátum. En las calles de España entera el silencio era estremecedor. Aún hoy su recuerdo le pone a uno el vello de punta. Millones de españoles salieron a la calle aquél 12 de julio, a punto están de cumplirse quince años, para pedir en silencio tu liberación, que no se cometiera una nueva barbarie. Incluso los niños, que nunca se sabe muy bien si se enteran o no de lo que pasa a su alrededor, caminaban con sigilo, como clamando por tu vida.
La emoción crecía conforme se acercaban las cuatro de la tarde, a esa hora terminaba el plazo dado. Tras el repiqueteo de las campanadas el silencio se hizo todavía más conmovedor.  A los cincuenta minutos te encontraron tirado sobre un camino, en medio de un charco de sangre en la arena, con dos balas del calibre 22 incrustadas en tu cabeza. Pronto se tuvo conocimiento en toda España, y en el mundo entero, del fatídico desenlace: gritos de indignación, muestras de impotencia, sollozos, abrazos, rostros quebrados y una desolación generalizada.

Apreciados todos los que habéis perdido la vida a manos de los innombrables que hoy se sientan -o se sentarán- en los Parlamentos de España y de Europa, apreciado Miguel Ángel, a nosotros también se nos revuelven las tripas.


* Publicado en Estrella Digital el 21.06.2012

lunes, 21 de mayo de 2012

Pegar a los padres


Los datos son escalofriantes. Durante el pasado año un total de 6.000 padres denunciaron a sus hijos por haber sido agredidos por éstos. ¡Duro, no! La cifra es más del doble que el número de casos registrados cinco años antes. En toda la historia de la humanidad, hablamos de siglos, un chaval ha puesto un dedo sobre la cara de cualquiera de sus padres. ¿Qué está pasando?

Pues en casa pasa lo que en la calle, lo que en los centros de enseñanza –centros educativos son, o debieran serlo, principalmente, los hogares- y lo que en la sociedad en general. Algunos padres se han olvidado de que educar implica un esfuerzo, reina el buenismo, se impone el relativismo más amoral, el bien y el mal no son conceptos claros y definidos, todo depende, y claro, tenemos lo que tenemos, tortas a mansalva. No regañes al niño, no des un azote a la niña, no castigues al nene, no prohíbas a la nena, no digas no, etc., y así hasta que el chaval cumple 13 o 14 años, entra en esa edad donde mandan las hormonas y los amigos, y cuando de repente le dices que no a algo pues te da una paliza. ¡Ah! Se siente. Claro que mi generación y las anteriores, y las anteriores de las anteriores, han pasado también por la adolescencia. Desde que el hombre es hombre. Pero cuando llegábamos a esa maravillosa edad sabíamos lo que era un castigo, lo que era quedarte sin salir con los amigos por suspender un examen, o por decir un taco, o por pegar a tu hermano, o…, tantos oes. Y sí, claro que sí, cuando nos lo ganábamos a pulso pues nos soltaban un azote con la zapatilla de estar por casa o nos arreaban un tortazo y  aquí paz y después gloria. Ni traumas, ni rencores, ni desequilibrios, ni gaitas. Todo eso que se han inventado los “neopedagogos” son memeces. La palabra que más educa a un niño es NO.


Pero claro, seguro que alguien lee esto y se lleva las manos a la cabeza; el pobre o la pobre se creerán que son ellos los que han inventado ahora el mundo. No queridos, el mundo lleva funcionando siglos, ha pasado por infinitas etapas y, sin pasarse claro está (vamos de un extremo a otro con demasiada facilidad), nunca ha ocurrido nada por dar un azote a un niño. Corren tiempos donde el sentido común, también en la educación, brilla por su ausencia y claro, llegamos a la cruda situación de que miles de padres reciben los “azotes” de sus “niños”. Más los que no denuncian.




* Publicado en el diario Estrella Digital el 22.05.2012
* Publicado en el diario El Pueblo el 23.05.2012

sábado, 12 de mayo de 2012

La nacionalización de Bankia



La nacionalización de Bankia es la prueba más evidente de que nuestro sistema financiero no es el más sólido y solvente del mundo, por mucho que le pese a nuestro ilustre, docto y sabio ex presidente Zapatero.

Les diré una cosa al oído, guarden silencio: España está intervenida por Europa. Si la palabra “intervenida” les produce angustia cámbienla por “tutelada” y seguro que hacen mejor la digestión. Rodrigo Rato no llegó a Caja Madrid para marcharse al año. Él tenía un plan para sanear Bankia (Caja Madrid más Bancaja, ésta última tóxica prácticamente en su totalidad) en cuatro años. El problema es que España no dispone de ese tiempo; así se lo anunció a Rajoy en Barcelona el presidente del Banco Central Europeo: “o se sanea la banca o habrá intervención”, le vino a decir. Y eso mismo transmitió De Guindos -¡guau, un Ministro que habla en ingles!- el pasado viernes a los tres peces gordos del sistema bancario español; a saber, Emilio Botín –Santander-, Francisco González –BBVA- e Isidro Fainé –Caixa-. Los mismos que se van a “comer” el marrón (incluido el puñetazo sobre la mesa del Ministro) y a repartir el pastel, es decir, Bankia. Tiempo al tiempo.

¿Y porqué tiene que acudir el Estado, o sea, nosotros, al rescate de Bankia? Por dos razones fundamentales: la primera es que nos lo exige Europa; la segunda, porque es la única manera de que la banca mundial acuda a “socorrer”, si se me permite la expresión, nuestro sistema financiero. En otras palabras, para que los bancos internacionales, una vez saneadas las cuentas de los nuestros, nos presten su dinero y vuelva a circular el crédito. Dios lo quiera.

¿Por qué hemos llegado a esta situación? Porque el Banco de España, con Miguel Ángel Fernández Ordóñez a la cabeza, no ha cumplido con su obligación. Si ante el boom de la burbuja inmobiliaria –de la que culpables somos todos, si bien es cierto que unos más que otros-, MAFO hubiera exigido a los bancos y cajas dotar provisiones para garantizar las inversiones realizadas en determinadas operaciones escandalosas, otro gallo hubiera cantado. Y si a más de un consejo de administración bancario se le hubiera expedientado e intervenido la situación hoy sería distinta. Pero de MAFO hablaré otro día, hoy concluyo preguntándome por lo que pensará Cristina Kirchner de la nacionalización, en España, de Bankia. Sin maldad.

* Publicado en el diario El Día el 11.05.2012
* Publicado en el diario La Verdad el 12.05.2012
* Colaboración en Diario Liberal el 12.05.2012



martes, 8 de mayo de 2012

Yo entiendo...

Yo entiendo que la progresía levante su voz frente al rescate de Bankia por el Gobierno del PP.
Yo no entiendo que la progresía guardara silencio ante el rescate de la banca por ZP. Tampoco se les ha oído con el indulto al Consejero Delegado del banco más poderoso de España.


Yo entiendo que CCOO y UGT tomen las calles hoy contra la reforma laboral del PP y el aumento del paro.
Yo no entiendo que hayan guardado silencio durante los primeros seis años del gobierno ZP con la pérdida de más de 2 millones de puestos de trabajo.


Yo entiendo que nos manifestáramos contra la guerra en Irak, a donde acudimos en misión humanitaria.
Yo no entiendo que nos quedáramos en casa ante la guerra en Libia, a donde fuimos a pegar tiros.


Yo entiendo que se tomaran las calles ante el accidente del Prestige.
Yo no entiendo la ausencia de protestas con el incendio de Guadalajara (año 2005), que costó la vida de 11 personas en medio de un sinfín de irregularidades.


Yo entiendo que el PSOE gane unas elecciones y tenga la legitimidad que le dan las urnas para gobernar.
Yo no entiendo que el PP gane unas elecciones -mayoría absoluta- y se cuestione la legitimidad que también le ha dado las urnas, también para gobernar.


Yo entiendo que el PP ha venido a este mundo para sanear los despropósitos del PSOE (años 1996 a 2004 y 2011 en adelante).
Yo no entiendo que nadie condene el despilfarro de los gobiernos socialistas ( 1982 a 1996 y 2004 a 2011).


Yo entiendo que se tomen las calles valencianas en protesta por los casos de corrupción.
Yo no entiendo que no haya calles andaluzas que tomar con consejeros en la cárcel hinchados a robar.


Yo entiendo que hay que ser libres para a unos y a otros criticar.
Yo no entiendo que haya personas que nunca vean lo que también los suyos hacen mal.


Infinito.

domingo, 6 de mayo de 2012

Shubert, Serenade y un Ejemplo

Shubert opinaba que la música que se preciase tenía que transmitir tristeza. Ya ven. Este magnífico compositor falleció a la edad de 31 años como consecuencia de las fiebres producidas por una gonorrea. A su muerte no había conseguido publicar gran parte de su obra. Hoy nos deleitamos con ella. Es lo que tiene, probablemente, optar por el ambiente bohemio de las tabernas en lugar de los salones influyentes de la realeza y la nobleza de la época.






A veces cuando uno abre un periódico y lo lee encuentra las mejores historias en la sección de “Cartas al director”. El otro día leí una que me puso un nudo en la garganta. No recuerdo los nombres, sí la historia. El artículo lo escribía su amiga y se lo dedicaba a él. Murió en febrero de este año con a penas veinte años; llevaba varios luchando contra el cáncer y las distintas enfermedades derivadas de aquél. Poco antes de morir reunió a sus padres, hermanos y sobrinos. A éstos últimos los obsequió con sabrosas golosinas. A todos con su sonrisa, entereza y amor. Sabían que ese momento sería probablemente el último que compartirían todos juntos antes de partir. Se me vuelve a poner el nudo. A los pocos días murió. Cuenta su amiga que fue admirable ver como un chaval es capaz de llevar esa cruz con la entereza y la fortaleza con la que él la portó. Sabía que su vida aquí llegaba a su término y, sin embargo, en aquella ocasión no paro de jugar y reír con sus sobrinos. Narra su amiga que exprimió la vida al máximo. Mientras leía la carta me preguntaba a mí mismo qué es lo que estoy haciendo yo con la mía, si también la estoy aprovechando al máximo. Reflexión. Este chaval es un ejemplo más de los muchos que hay a nuestro alrededor, lo que pasa es que estamos a otras cosas. Quizás nos estemos equivocando. Ya he dicho que no recuerdo su nombre, pero esta noche donde quiera que esté lo tendré presente en mi oración. Descanse en paz.


jueves, 3 de mayo de 2012

Una Comunión con mayúsculas



En unas semanas cientos de miles de niños culminaran su encuentro con Jesús, aquél que murió en la Cruz para nuestra salvación. El momento de celebrar la Primera Comunión se acerca y, junto con el Bautismo, es uno de los sacramentos más importantes para un cristiano. Tomar el Cuerpo de Cristo implica comulgar, de ahí el nombre de Comunión, con su muerte y posterior resurrección. Un hecho y el otro son los que dotan de pleno sentido nuestra Fe. 



El pasado domingo el Santo Padre exhortó a párrocos, padres y catequistas a preparar la celebración de la Primera Comunión “con fe, gran fervor, pero también con sobriedad”. Hace bien Benedicto XVI en recordarnos lo importante del fondo sobre la sobredimensionada importancia dada en los últimos tiempos a la forma. Permítanme el comentario, pero últimamente muchas de las celebraciones de tan importante sacramento parecen de todo menos de lo que se trata, a saber, el primer encuentro, personal e íntimo, con Cristo. Ya no solo es la familia la encargada de acompañar a los protagonistas del evento –el niño y Jesús-, sino que amigos de los padres, de los abuelos y de los propios niños acuden al “festín” convirtiendo éste en un macro banquete que desvirtúa lo acaecido. ¿Cuántos padres se ven obligados a pedir un préstamo bancario para “salvar la situación”? Unos padres arrodillados ante el materialismo que nos corroe y doblegados ante el “que dirán”. Reportajes de fotografía, vídeo y ciberespacio en Internet conducen a la familia a la miseria y a la penuria económica. Los niños, de 8, 9 o 10 años, aparecen vestidos como si de un Capitán del Ejercito o General de la Guardia Civil se tratara. Las niñas, al parecer, no celebran su Primera Comunión con Cristo, sino, por los atuendos que llevan, la más suntuosa de sus bodas. Como les digo, todo fachada y los padres endeudados hasta las cejas. 

Yo me pregunto: ¿es esto lo que nos pide Jesús para el sacramento de la Primera Comunión? Pues yo diría que todo lo contrario. Lo que menos ha de importarnos es la forma, lo que más: el Contenido. La vida del cristiano debe ir orientada, y eso es lo que se nos pide, a secundar el ejemplo ofrecido por Jesús de Nazaret; Él mismo nos pidió que diéramos de comer al hambriento y de beber al sediento. El Papa nos invita a la reflexión y Jesús nos indicó el camino; atendamos a uno y al Otro. Es la Primera Comunión, con mayúsculas.




*** Publicado en El Día el 03.05.2012

domingo, 15 de abril de 2012

¿Deberes sí, deberes no?

Hace unos meses surgió este debate en Francia y ahora que llega a España les juro por lo más sagrado que yo pensaba que el “problema” ya estaba superado. Por supuesto que deberes no, ¡faltaría más! Pobrecitos los niños, ahora entiendo porque andan tan traumatizados y tocados psicológicamente: ¡por los deberes! Y es que es normal, asisten a una escuela donde ya sabemos que los métodos pedagógicos son duros, estrictos y contundentes. Demasiada disciplina dicen algunos. Encima llegan a casa y se tienen que poner a hacer deberes: sumas, restas, dictados, redacciones, trabajos, etc. ¡Qué barbaridad! Perdonen mi ignorancia pero yo pensaba que el tema ya estaba superado. Hay que erradicar los deberes en casa como sea, ¡pobres niños traumatizados! Yo, que vine a este mundo en la década de los 70, recuerdo que teníamos todas las tardes libres para jugar al balón, hacer gamberradas y empezar a fumar nuestros primeros pitillos. ¿Deberes? Yo no sé lo que es eso, ni los de mi generación. De hecho fuimos creciendo sin ellos y por eso estamos tan sanos. En el instituto los profesores nos decían que no estudiáramos, que eso podía originar injusticias y dolor de codos, que crearía diferencias de clase y que podría causarnos agobios y secuelas varias. Y por eso tuvimos unos resultados tan excelentes. Todos sabíamos lo mismo de las distintas disciplinas, todos igual de listos. Luego, unos llegamos a la Universidad, otros a Formación Profesional, y más de lo mismo; así, sin esfuerzo, estudio ni trabajo conseguimos nuestros títulos. Y después, pues suma y sigue, nos incorporamos al mercado laboral y, ¿adivinan qué es lo que ocurrió? ¡Que el trabajo nos lo hacían nuestros jefes o empresarios! Por ello recuerdo con tanto cariño aquellos maravillosos años en los que nos dieron todo hecho, y no como ahora, donde los chavales andan, perdonen que me repita, traumatizados, estresados y con graves carencias psicológicas, que no afectivas. Y todo lo hasta aquí dicho sin tener en cuenta a los pobres padres de hoy, ¡cualquiera se mete a padre!, toda la tarde con los chiquillos, haciendo con ellos dictados, sumas y restas, pendientes de su formación y de su educación, eso tiene que ser estresante, ¡con lo bien que los educa el Estado! ¿Qué si hay que mandar deberes a casa? Pero qué preguntas, qué barbaridad, yo lo tengo claro.





* Publicado en La Tribuna de Albacete el 17.04.2012

sábado, 24 de marzo de 2012

En la "Champions League"


Hasta hace muy poquito tuvimos hospedado en La Moncloa al presidente de la Champions League. Ahora anda dando conferencias por Venezuela -¡dónde si no!-, enseñando al prójimo cómo ser austero y escrupuloso en el uso del dinero de los ciudadanos, cómo inculcar en la ciudadanía los valores que vinculan al pueblo con su patria y cómo elevar lo que nos une para acabar con lo que nos separa. También, me cuentan, habla en sus conferencias –lógicamente se pone como ejemplo- de cómo acabar con el paro, de cómo combatir el déficit y de cómo dejar las cuentas públicas saneadas y con superávit. Le preguntan, por lo visto, que cómo con ese balance ha podido perder las elecciones generales obteniendo, además, el peor resultado electoral de la historia de su partido. “No tengo ni idea”, dicen que dice.

            Como líder del socialismo español tenemos ahora a un hombre por todos desconocido hasta el pasado congreso de Sevilla. Nunca antes ha desempeñado tareas de gobierno y su gestión al frente de las múltiples multinacionales por las que ha pasado ha sido de un éxito arrollador; por ello es la esperanza y la alegría del socialista español. No hablo de Carlos Slim –el hombre más rico del mundo en el 2011 según la revista Forbes- ni de su “consejero delegado”, el otrora socialista Felipe González. No, me refiero a la estrella de las estrellas, al que si estuviera en el gobierno nos sacaría de la crisis sin hacer un solo recorte –y no como estos fachas-, al que duplicaría el salario de funcionarios, pensionistas y le pondría uno a las amas de casa… Me refiero, como no podía ser de otra manera, al joven, esperanzador y regenerador líder del socialismo español, al salvador de nuestra patria, el gurú de los gestores, el de todo para el pueblo, señoras, señores, ante ustedes: Alfredo Pérez Rubalcaba, o A. P. para los amigos. Desconocido en lo público pero con una exitosa carrera profesional en lo privado, como ya he indicado.

            José Antonio Griñán, con la ayuda inestimable de Alfredo, va a arrasar el domingo en Andalucía. Quien piense lo contrario no está bien de la cabeza, los hechos hablan por sí solos. Después de 30 años de socialismo andaluz, la Comunidad Autónoma de Andalucía  es la única que juega aún hoy en la Champions League: es el territorio nacional con menos paro, el que tiene las tasas de desempleo juvenil más bajas, el que más inversiones de empresas privadas ostenta, la tierra a la que acuden la casi totalidad de las multinacionales que invierten en España. Andalucía es ejemplo de educación pública: chinos, japoneses, suizos, suecos, noruegos, finlandeses y alemanes vienen a estudiar su sistema académico. Otro tanto pasa con su sistema público de salud. Es la región de España con mejores infraestructuras, con menos corrupción y donde más transparencia existe en las cuentas públicas. Es, a su vez, la comunidad de toda España con el nivel de renta per cápita más alto, o lo que es lo mismo, la región más rica en lo que a la ciudadanía se refiere. Por ello y por muchísimas cosas más, el domingo va a arrasar el socialista Griñán.

*Publicado en La Tribuna de Albacete el 24.03.2012

viernes, 23 de marzo de 2012

Alegría


Alegría. Elijo esta palabra para mostrar mi sentir al abrir esta página, la mía y la de ustedes, y encontrarme el mensaje de un viejo amigo, del que durante años el contacto he perdido, y que me quiere escribir. Alegría. No tardes, amigo, ansioso estoy por saber de ti.

Fueron muchos, antaño, los momentos y experiencias compartidas. Aquellos años de adolescencia donde no terminábamos de ser adultos pero tampoco ya éramos niños. Días de instituto en los que, entre bromas y risas, nos íbamos haciendo hombres. Esa etapa concluyó y cada uno siguió su camino. Coincidimos luego en la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense, pero en carreras distintas. Concluida aquella hermosa etapa lo último que de él he sabido ha sido por otras personas, que seguía practicando atletismo, que continuaba con las oposiciones a judicatura: ¿eres ya juez? Luego pasaron los años y cambié de ciudad, recuerdo que una vez le llamé por teléfono y la sorpresa se la dí yo a él. Perdido su número, desde entonces el recuerdo ha mantenido viva la esperanza de algún día volverlo a ver.

Ha sido hoy, como digo, al abrir esta página que noticias he tenido de él: me escribe mi amigo y siento alegría: pronto nos volveremos a ver. 

lunes, 19 de marzo de 2012

¿Sabes la hora que es?

En la noche profunda
En la noche fría, absorto en la lectura
de mi libro, olvidé la hora de acostarme.
Los perfumes de mi colcha bordada en oro
se han disipado ya y el fuego se ha apagado.
Mi bella amiga, que hasta entonces a duras penas
había dominado su ira, me arrebata la lámpara
y me pregunta: ¿Sabes la hora que es? 



Poema de Yan Tsentsai (s. XVIII).